¿Se pueden entrenar las emociones?
¿Cuánto cuidas de tus emociones?
¿Sabes hasta qué punto tus emociones determinan los resultados que obtienes en la vida?
¿Te gustaría aprender a gestionar tus emociones de forma eficaz?
Todo en la vida responde a la Ley de Causa y Efecto.
Toda emoción es provocada bien por una situación, bien por un agente externo, pero aquí lo que a mí más me interesa del entrenamiento emocional son aquellas emociones que generamos nosotros mismos por medio de nuestros pensamientos, por medio de todos los mensajes que inconscientemente le damos a nuestra cabeza, la cual crea unas emociones que, finalmente, es lo que experimentamos, lo que sentimos.
Hicieron un estudio para calcular el número de pensamientos que tenemos en un día, y se concluyó que tenemos alrededor de 65.000 pensamientos al día, de los cuales solamente tenemos 12 pensamientos principales que se repite cada uno de ellos 5400 veces.
¡¡Vamos a imaginar lo que es tener en la cabeza un gusano mental dando vueltas todo el día al mismo pensamiento, al mismo mensaje!!
Evidentemente, de todos estos pensamientos… ¡¡de casi todos no nos damos cuenta!! hay muchos que van por nuestra cabeza y lo único que somos capaces de notar es ruido. Ruido mental.
¿Qué hacemos en un entrenamiento emocional?
Empezamos por trabajar ese ruido mental, por tomar conciencia de cuáles son nuestros 12 pensamientos principales, hacer una selección consciente de ellos, enseñarle a nuestra mente qué es lo que nosotros queremos depositar en ella, y qué cosas sobran.
En un entrenamiento emocional aprendemos también a cambiar la relación que solemos tener con nuestra mente, aprendemos a relacionarnos con ella de una manera mucho más amable, mucho más amorosa.
Una de las funciones que tiene nuestra mente es la de protegernos, la de mantenernos en nuestra zona cómoda de pensamiento, a pesar de que muchas veces nuestra forma de pensamiento nos termina dañando, pero nuestra mente se guía por lo conocido.
Ella NO es nuestra enemiga, debemos aprender a trabajar con ella en la misma dirección, debemos ayudarla para que puede vaciarse de todo ese ruido, para que esté mucho más operativa y libre para trabajar a nuestro favor.
En muchas ocasiones lo único de lo que nos damos cuenta es de que tenemos sensaciones, tenemos emociones, que no son las que queremos experimentar y no sabemos de dónde vienen, no sabemos porqué las estamos sintiendo ni cómo podemos dejar de sentirlas.
Uno de los Principios Herméticos nos dice que el Todo es mente: el Principio del Mentalismo. Todo comienza en un pensamiento; se habla de que Dios es mente.Todo lo que vemos está creado por una Mente Superior, Todo corresponde a un Equilibrio.
Ahora veamos…
¿Cuál es la emoción que más te gusta sentir, la que te gustaría experimentar la mayor parte del tiempo?
Cuando piensas en cúales son tus objetivos, ¿qué es lo primero que se te viene a la cabeza?
¿Lo que te gustaría conseguir, algo que quieres «tener»?
o… ¿piensas en lo que te gustaría sentir, en lo que quieres «SER»?
- ¿Alguna vez te has planteado tus objetivos desde el punto de vista emocional?
- ¿Alguna vez te has parado a pensar en cuáles son las emociones que te gustaría experimentar la mayor parte del tiempo?
- ¿Piensas que hay alguna relación entre lo que consigues y cómo te sientes?
¿Qué fué antes, el huevo o la gallina?
Te voy a contar un secreto…
La calidad de tu vida la determinan las emociones que sientes la mayor parte del tiempo.
Puedes tener cumplidos todos tus objetivos materiales y haber logrado un trabajo estupendo con un sueldo increíble, una casa preciosa, una pareja ideal, una vida estable y cómoda.
¡Ay! si esto fuera siempre significativo de felicidad… pero todos sabemos que no es así.
¡Cuántas personas, aún teniendolo todo son tremendamente infelices! y en cambio otras personas, con mucho menos se sienten mucho más completos.
Evidentemente todos queremos tener una vida buena, ¡yo no soy una excepción! Pero sobre todo, todos aspiramos a la misma meta: SER felices.
¿Dónde está el misterio entonces? ¿Cuál es la ecuación buena?
Felicidad y facilidad no son sinónimos… No es más feliz quien tiene la vida fácil, más bien y por suerte o por desgracia suele ser al revés.
La felicidad es un estado que se alimenta de varias emociones, de decisiones, de experiencias, aprendizajes…
Y lo más importante; La felicidad es por encima de todo, una DECISIÓN.
¡¡Todo empieza en el pensamiento!!
El pensamiento genera una emoción y ésta nos lleva a tomar nuestras decisiones. De nuestras decisiones dependen los resultados que obtenemos en la vida.
Si el resultado final que deseas es «SER feliz»…
- ¿Qué pensamientos de los que AHORA tienes te van a ayudar o a entorpecer el llegar a esa meta?
- ¿Qué emociones tienes que alimentar para sentirte feliz?
- ¿Qué decisiones de las que tomas están alineadas con ese resultado final?
- ¿Cuáles deberías modificar?
- ¿Cuántos de tus objetivos pertenecen al «Tener», al «Hacer», y cuántos al «SER»?
- ¿Qué prioridad le das a cada uno de ellos?
¿Te gustaría poner a trabajar a tus Emociones para ti, y a tu favor?
En un Entrenamiento Emocional aprenderás a:
★ Identificar y detener el ruido mental
★ establecer tus objetivos emocionales por encima de los materiales
★ tomar conciencia, limpiar y liberar las emociones que te están impidiendo vivir como deseas
★ abrir el marco de posibilidades para poder experimentarlas la mayor parte del tiempo.
★ establecer rutas de pensamiento acordes a los objetivos marcados
★ encontrar el hilo conductor entre el SER – HACER – TENER
Fundamentalmente trabajaremos en estos niveles:
– Emociones
– Pensamiento
– Actitudes
– Decisiones
¿Cuál es la «finalidad última» del Entrenamiento?
El objetivo es que tengas una Vida Plena
Si deseas hacer un Entrenamiento Emocional, solicita tu proceso conmigo
Recibe un fuerte abrazo, y ¡hasta pronto!